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Pavo guisado

¿Quieres cocinar algo que suene saludable y elegante pero que realmente solo requiere una olla y paciencia? Este pavo guisado es tu receta. Porque, seamos sinceros, el pavo no solo es para Navidad, también está aquí para salvarte de la rutina de la pechuga a la plancha. 

Si pensabas que el pavo era seco como suela de alpargata, esta es la receta que te hará cambiar de opinión.

Ingredientes

1 kg

1

3

2

1 vaso

1 cda

 

Pavo

Cebolla

Pimientos

Zanahoria

Vino blanco

Adobo mágico

AOVE

Paso 1

El pavo troceado en tacos lo ponemos en un bol con una cucharada de adobo mágico. Esto es indispensable si queréis triunfar.

Paso 2

Picamos als verduras en juliana, en medias lunas la zanahoria, que queden bonitas

Paso 3

En una olla grande (tamaño “no me cabe en el lavavajillas”), calienta un buen chorro de AOVE. Añade los trozos de pavo y dóralos por todos lados. No te obsesiones con que queden perfectos, esto es un guiso, no MasterChef.

Paso 4

Saca el pavo y en el mismo aceite, sofríe la cebolla, zanahorias y ajos hasta que empiecen a ablandarse. Porque en la vida, como en los guisos, hay que ablandarse a fuego lento.

Paso 5

Echa un buen vaso de vino blanco, para que todo el mundo (incluido tú) se relaje.

Y deja que se evapore el alcohol a fuego fuerte durante 2 minutos.

Paso 6

Vuelve a meter el pavo en la olla, dale la bienvenida como si fuera el protagonista que nunca debió salir y tapa la olla. Aquí es donde el pavo se toma su tiempo. 

Deja cocinar a fuego lento durante una hora y media. Sí, lo sé, es tiempo, pero mientras tanto puedes hacer una foto para Instagram con el pavo en el primer plano, que parece que lo estás cuidando mucho.

Paso final

Cuando veas que el pavo está tan tierno que se deshace, apaga el fuego. Prueba el guiso, corrige de sal y, si te sientes audaz, añade un poco más de vino, para el guiso y para ti.

Sirve el guiso  y decora con una ramita de hierbas frescas para la foto final. Porque, al final del día, lo importante no es solo comer bien, sino que parezca que te has pasado toda la tarde cocinando. 

Y no olvides el hashtag: #ChefPorUnDía

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